Hola a todos,
Como sabéis, ayer tuvimos en el cole la "Fiesta del otoño",
gracias a la colaboración de las mamás y papás del AMPA
Fueron muchas las actividades desarrolladas. Entre ellas,
estuvo la narración del cuento, “La castaña que reventó de risa”.
Gema, me lo ha enviado para que lo pueda colgar en el blog y
así lo podáis ver en casa.
Había
una brasa de carbón, una paja y una castaña que eran muy amigas. Un día estaban
aburridas sin saber qué hacer y decidieron salir a dar un paseo por el campo.
Caminando,
caminando, llegaron a un río y no sabían cómo atravesarlo. La castaña, que era
muy lista propuso lo siguiente:
- Como la paja puede flotar
en el agua, yo me montaré encima de ella y me llevará nadando a la otra orilla.
Luego regresará y te llevará a ti, dijo dirigiéndose a la brasa. A las dos les
pareció buena idea y así lo hicieron.
Primero
pasó a la castaña y luego volvió a por la brasa.
Pero
cuando estaban a mitad del río, la paja sintió que se estaba quemando con el
calor de la brasa de carbón y, casi sin querer, hizo un movimiento brusco.
De
una sacudida, la tiró al agua.
Cuando la castaña lo vio le dio un
ataque de risa.
Se
reía tan a gusto de ver a la brasa remojada, se reía con tanta fuerza, que
reventó.
La paja llegó a la orilla completamente chamuscada. La brasa llegó más tarde chorreando y apagada por completo. Ambas estaban muy enfadadas con la castaña porque se había reído cuando ellas lo pasaban mal, pero cuando vieron que con la risa había reventado su piel y estaba destrozada, se compadecieron de ella y fueron a buscar al sastre para que la remendara y le recosiera el roto.
El
sastre solo tenía un trozo de tela de color más claro que el de la piel de la
castaña y tuvo que apañarla poniéndole un pedazo de ese color.
Por eso ahora andan todas las
castañas con un trozo de piel más claro
Fin
Nota: No hemos conseguido saber quién es el autor del cuento.
Un saludo